Terry Gilliam monta un circo y le crecen los enanos. Es bien conocida su fama de gafe y no poco merecida: se le queman los platós, cancelan sus proyectos, reducen sus presupuestos y... se le mueren los actores.
Después de su malogrado "The man who killed Don Quixote" - que por cierto volverá a retomarse en breve con Johnny Depp y con un Don Quijote aún por determinar - Terry acometió dos proyectos a cual más dispar: el comercial "El secreto de los hermanos Grimm" (2005) que a casi nadie gustó, y "Tideland" (2005) que a casi todos disgustó.
Ahora tres años después nos llega su nueva paranoia, "The imaginarium of Doctor Parnassus", que pasó discretamente por Cannes y que cuenta con el morbo añadido de ser el último trabajo de Heath Ledger - que falleció durante su rodaje -, su papel fue completado no por 1 sino por 3 estrellas: Johnny Depp, Jude Law y Colin Farrell.
El resultado de tan extravagante resolución podría convertirse en el mayor de sus delirios o por el contrario en su film más entrañable y reivindicable. Gilliam es capaz de lo mejor y de lo peor pero a su favor cuenta con la habilidad de no caer al vacío a pesar de sortear en multitud de ocasiones el peligro y de rozar incluso el ridículo.
"The imaginarium of Doctor Parnassus" aún no cuenta con fecha de estreno confirmada en nuestro país.
1 comentario:
Quiero ver como concluye "El hombre que mató a Don Quijote". Me quedé con ganas después de ver el documental "Lost in la Mancha"
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