La 82 edición de los Oscar de la Academia cumplió, hasta cierto punto, sus previsiones y al final como rezaba algún titular "David venció a Goliath". Una producción modesta como "En tierra hostil" - que se presentó hace dos años en Venecia con total indiferencia y que ni su propia distribuidora sabía muy bien que hacer con ella - venció a la gigantesca "Avatar", la película más exitosa de todos los tiempos. Kathryn Bigelow hizo historia convirtiéndose en la primera mujer premiada con un Oscar como directora, dando así un corte de manga a su ex-pareja James Cameron, que en esta ocasión no pudo ser otra vez "el Rey del mundo", y le jodió, vaya sí le jodió.
"Avatar" y "En tierra hostil" partían con 9 nominaciones cada una y finalmente "Avatar" tuvo que conformarse con 3 premios técnicos (fotografía, dirección artística y efectos visuales) mientras que "En tierra hostil" se llevó 6, 3 de ellos muy importantes (película, directora, guión original, montaje, sonido y montaje de sonido). "Precious" puso la nota independiente - y afroamericana - a la velada y se fue más que dignamente a casa con 2 premios (actriz secundaria y guión adaptado), el segundo de ellos fue el culpable de que "Up in the air" se fuera injustamente de vacio, sin un reconocimiento a la excelente labor de Jason Reitman. "Corazón rebelde" también se llevó 2 (actor y canción), el premio a Jeff Bridges aunque tardío era esperado, necesario y sobradamente merecido. La entrañable "Up" otros 2 (banda sonora y película de animación), aunque merecía muchos más.
"Malditos bastardos" tenía un premio asegurado para Christoph Waltz - un actor austriaco que hasta hace 2 días se le podía ver con regularidad en los teatros de Viena - pero no sumó ningún otro. Polémico fue el premio a Sandra Bullock por su primer papel medianamente serio en la aquí inédita "The blind side", un día después de recibir dos premios como peor actriz en los Razzie. La argentina "El secreto de sus ojos" le quitó un premio casi cantado a la alemana "La cinta blanca".
El resto de premios recayó en "La Reina Victoria" (vestuario) o "Star Trek" (maquillaje) en una gala que pese a eliminar la interpretación en vivo de los canciones nominadas - craso error - y a resumir los premios honoríficos con un simple video - indigno modo de elogiar carreras como las de Lauren Bacall, Roger Corman o Gordon Willis - superó las 3 horas de duración y fue un aburrimiento de principio a fin. Videos faltos de emoción, parejas faltas de química, presentadores faltos de chispa - Alec Baldwin de perdido que estaba rozaba el patetismo -, premios faltos de sorpresa, .... en resumen, una de las peores galas que se recuerdan en muchos, muchos años. Ni siquiera James Taylor cantando el "In my life" de los Beatles durante el tradicional "In memoriam" consiguió emocionar y sólo a Ben Stiller - disfrazado de na'vi - se le debe un único momento divertido en toda la noche.
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